El colectivo Iniciativa Empresarial del Noroeste (IEN) por Europa reclama al Gobierno central que adopte medidas para mantener operativa la térmica de As Pontes, «dado que las restricciones al suministro de gas que está aplicando Rusia amenazan de manera grave la capacidad de los países europeos para cubrir sus necesidades energéticas». El presidente de la patronal, Manuel Pérez, incide en que las circunstancias actuales «son mucho más acuciantes» que las que provocaron que la central volviera a ponerse en marcha en octubre, «cuando pocos preveían que la escalada de precios de la energía se agravaría como lo ha hecho».
Esgrime que el ministro alemán de Economía, ecologista, «ha tenido que anunciar la reactivación de las viejas centrales de carbón, y Austria y Holanda están dando el mismo paso». «El Gobierno tiene que garantizar el suministro, si es necesario nacionalizando los recursos», enfatiza. E insiste en que resulta incomprensible que «en este escenario se permita el cierre de la térmica con mayor capacidad de España». Pérez argumenta el carácter «estratégico» de la fábrica pontesa, para afrontar la situación actual «y responder a eventuales circunstancias del futuro», tras el desmantelamiento de la mayoría de las plantas de carbón.
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