El declive poblacional es inexorable no solamente en buena parte de los municipios de Ferrol, Eume y Ortegal, ya que pasa por ser una tendencia generalizada en casi toda aquella España que escapa al formato de ciudades cada vez más inabarcables.

Sin embargo, más allá de un simple deseo de apelar al optimismo, hay algunos matices en el último padrón municipal, recién publicado por el Instituto Nacional de Estadística. Son cuatro los ayuntamientos que logran un repunte en su número de vecinos y destaca el caso de Valdoviño.

Tras la emergencia de la crisis sanitaria de 2020, que hizo aflorar el afán por escapar al campo de una parte sustancial de la ciudadanía, consolida ese incremento y escala hasta los 6.924 habitantes. La suya es la mayor subida en toda la comarca, 52 nuevos empadronados en los doce últimos meses.

Alza también importante en Ares, con 36 residentes más y un logro, superar la barrera de los 6.000 para llegar a 6.033 en total. Ambos municipios están inmersos en sendos procesos de mejora de servicios, inherentes a un empuje poblacional que invita a pedir más prestaciones. Valdoviño, sin ir más lejos, ha anunciado en la última semana que tendrá escuela infantil y busca dotarse de su primer instituto.

Narón gana 35 vecinos y vuelve a coger velocidad tras despegarse ligeramente de los 40.000; al cierre del 2022, tiene 38.938 residentes. Cierra la lista Mugardos, que con 20 empadronados escala a 5.246 y abre una senda de progreso demográfico. Desde ahí, los datos son negativos. Ferrol sigue en los 64.000, eso sí, para firmar 64.158 vecinos, pero vuelve a perder volumen censal.

Fene baja a 12.702 y As Pontes se cae de los 10.000, retiene 9.974 habitantes y se expone a la pérdida de cuatro escaños en los comicios locales de mayo próximo. En la misma coyuntura, que se veía venir en años recientes, está Neda, que está ya por debajo de los 5.000 residentes con 4.972 en este año.

Hay bajadas notables, como la de Pontedeume, con 7.563 vecinos, mientras que Cedeira tiene 6.626 y Ortigueira 5.420. Por debajo de los 5.000 y también con pérdidas poblacionales están Cariño, con 3.699 habitantes; Cabanas, que tiene 3.340; San Sadurniño, con 2.792; Monfero, que baja a 1.865; Mañón, con 1.287; A Capela, con 1.225, y Moeche, que tiene 1.191 vecinos.

La brecha entre los dos municipios menos poblados es un poco más grande, ya que mientras As Somozas se queda en 1.073 empadronados Cerdido ya desciende a 1.060 en total.

FERROL 360