Los preparativos para que la central térmica de Endesa en As Pontes pueda volver a producir si así lo requiere el gestor técnico del sistema, Red Eléctrica Española, se han centrado en las últimas semanas en organizar la logística del abastecimiento. Tareas que han cristalizado en la contratación de tres buques que llegarán -el primero de ellos la próxima semana-, si se cumplen las previsiones, en octubre, noviembre y diciembre. Sin embargo, aunque la central está en condiciones de arrancar en cualquier momento -se encuentra en situación de disponibilidad para el sistema eléctrico desde principios de julio, la última vez que operó-, en estos momentos cuenta con una plantilla que ronda las 40 personas, insuficiente para mantener operativas las instalaciones de forma continuada.
Por ello, ese cambio de escenario que se está produciendo por el convulso panorama energético a nivel internacional y la escalada de los precios de la luz debido principalmente al encarecimiento del gas, abre la puerta al regreso de personal que pertenecía a la térmica y que se encuentra desplazado en otros centros de trabajo.
Ricardo Casas, portavoz del comité de empresa (CC.OO.), criticó que la dirección aún no haya accedido a mantener un encuentro para explicar todos los cambios que se van a afrontar si se reactiva la planta y afirma que toda la información de la que disponen, como la previsión de llegada de tres barcos con carbón, o los contactos con el personal desplazado, la obtengan de forma extraoficial.
El alcalde de As Pontes, Valentín González, también apeló a la dimensión económica de la reactivación de la generación con carbón y recordó que en los últimos años ya defendió que este tipo de centrales se mantuviera como respaldo a las renovables mientras no haya otras fuentes alternativas.
La Voz de Galicia
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