Los trabajadores de Einsa Print convocarán este mes varias huelgas de 24 horas para tratar de presionar a la empresa antes de que se acabe la negociación del Ere que supone el despido de 154 personas de la fábrica asentada en el polígono industrial de Penapurreira.

Esta medida, respaldada por unanimidad por todos los trabajadores, se acordó en una asamblea, celebrada el martes a las 15.00 horas, en la que se aprobó un nuevo calendario de movilizaciones diseñado con el objetivo de elevar la presión y visibilizar al máximo el conflicto laboral.
La primera huelga de 24 horas está prevista para este viernes, día 17 y, de forma paralela, se convoca una movilización en Pontedeume. «Saímos da parada de taxis ás 12.00 horas e estaremos ata as 14.00. A idea é repartir octavillas entre a xente», anuncian desde el comité de empresa.

La semana siguiente, el lunes, día 20, tienen prevista una nueva reunión con la empresa en Santiago y el miércoles, día 22, está programada otra. Para ese día convocan, además, otra de las huelgas de 24 horas.

«A nosa intención é pillar autobuses para facer unha concentración en Santiago mentres se celebra a reunión coa empresa», explica Daniel Pena, de la CIG, y el presidente del comité de empresa de Einsa Print, que anuncia que posiblemente se convocarán otras dos huelgas de 24 horas los días 29 y 30, porque a final de mes se cierra el plazo de la mesa de negociación del expediente de regulación de empleo con la empresa.

«O obxectivo é parar a planta e presionar o máximo posible», indica Pena, que señala que una de sus intenciones es conseguir una prórroga para seguir negociando con la empresa para buscar una alternativa. «Tamén está pendiente a reunión solicitada polos concellos e os sindicatos coa Xunta e co Ministerio, por iso é importante tamén a prórroga», dice.

Desde el inicio del conflicto, desde el comité de empresa rechazaron el Ere presentado por la empresa y defendieron la necesidad de buscar otro plan de viabilidad que no sea a través de un despido colectivo, o al menos, que no afecte a un número tan elevado de trabajadores.

«A xente está cabreada e preocupada pola situación. Pero hoxe quedoulles claro a todos a necesidade de respaldar as mobilizacións porque son necesarias e porque van ser positivas para encontrar a solución mellor posible, xa sexa con menos despidos ou polo menos para irse coas mellores condicións posibles», valora el presidente del comité.

EL PROGRESO