Hay niños que tienen claras sus aficiones desde bien pequeños y es porque parece que ya van escritas en su ADN. Llámese precocidad o talento innato, es cierto que hay ‘peques’ que despuntan en alguna área desde una muy temprana edad, lo que les lleva a vivir experiencias muy por delante de lo que otros de su misma generación han vivido. Un ejemplo es Fran da Silva, un joven piloto pontés de tan solo seis años que afronta este fin de semana en su concello la última carrera de la Copa Ibérica de motociclismo, de la que puede proclamarse campeón en su año de debut en la competición oficial.
Tuvo su primera moto de gasolina cuando aún no tenía dos años y a los 27 meses sus padres lo inscribieron en una escuela de formación en motociclismo que se acababa de abrir en Ferrol «como una actividad extraescolar para probar si así le gustaba». «Al ser tan pequeño, al principio fue un poco difícil enseñarle los ejercicios que se hacían, pero poco a poco se fue adaptando hasta que con dos años y ocho meses ya era capaz de andar él solo y ahí empezó todo«, recuerda su padre.
Con tres años empezó a rodar en circuitos grandes de kárting y poco después participó en varias carreras del campeonato Nacional de Portugal, combinando esto con los entrenamientos de los sábados en el campeonato Gallego.
«Se adaptó bien a este deporte, gustándole cada vez más, y con cuatro y cinco años participó en el campeonato de España en modo exhibición, ya que hasta los seis no se puede competir», relata Ángel da Silva.
Y llegó el 2021, «el año esperado por sus ganas de competir», y debutó en la Copa Ibérica, firmando el mejor tiempo en las dos cronos y ganando las dos carreras en la categoría Promo3 Polini 4.2 de la primera prueba, en Karpetania. «Fue una sorpresa, pues en estas motos compiten niños de hasta diez años, con lo cual más expertos que Fran», destaca su padre.
Otro primer puesto, un segundo y un tercero en las otras citas de esta Copa hacen que Fran22 lidere la clasificación general. Su primer título está a solo un paso, y puede conseguirlo en su casa, ya que el circuito de As Pontes acoge este fin de semana la última carrera.
MÁS EXPERIENCIAS. La pasión de Fran por las motos es evidente en las ganas que tiene de rodar en un circuito, de forma que este año, a mayores, participó en el campeonato de España de minivelocidad, en el que logró un meritorio puesto 24 de 57, y en otras carreras.
Acudió a dos en Barcelona, en las que firmó cuatro cuartos puestos; dos del campeonato de Castilla y León, con dos cuartos y dos quintos; y cuatro pruebas del campeonato Gallego, en las que consiguió tres segundas plazas y una tercera y, en la última, celebrada este mes en As Pontes, finalizó en el primer lugar en iniciación, de seis a ocho años, y en el segundo de toda la parrilla, con pilotos de seis a doce años.
El Progreso
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