Los socialistas gallegos celebraron este domingo en A Coruña una jornada municipalista con la presencia de la ministra Isabel Rodríguez y el secretario de política municipal del PSOE, Alfonso Rodríguez Gómez de Celis.

El acto, concebido para impulsar la candidatura de Inés Rey, sirvió para poner de manifiesto la baja movilización del electorado socialista, ya que apenas se congregaron un centenar de militantes y cargos de segundo nivel procedentes de toda Galicia cuando solo la agrupación coruñesa cuenta con cerca de quinientos afiliados.

Además, contribuyó a reabrir el debate sobre la candidatura a la Xunta, de la mano de la entrevista concedida al diario La Opinión por el andaluz Gómez de Celis. Después de que el alcalde de Vigo manifestase a través de su equipo su enfado por las inoportunas declaraciones de Valentín González Formoso al mostrarse dispuesto a renunciar a concurrir a las autonómicas para dar espacio a Besteiro, la orden fue zanjar el debate para evitar generar inestabilidad en año electoral.

Sin embargo, la visita de Gómez de Celis, colaborador de Santos Cerdán, ha vuelto a abrir el asunto con su intento de respaldar a un Formoso en horas bajas. Estas declaraciones no han gustado a muchos alcaldes, que quieren evitar ahora el debate sobre el liderazgo del PSdeG hasta que se celebren las primarias para elegir al candidato a la Xunta.

El patinazo de esta estrategia de Ferraz coincide en el tiempo con el momento en que Formoso debe despejar si se centra en el ámbito autonómico, cerrando su etapa como alcalde y presidente de Diputación de A Coruña. Por el momento, parece que Formoso se resiste a dejar el poder provincial, a la vista de que las encuestas recogen en su etapa un retroceso del PSdeG a nivel autonómico y que él no consigue alcanzar los niveles de su predecesor, Gonzalo Caballero, ni en popularidad ni en intención de voto para los socialistas.

EL PSDEG, EN CAÍDA

De hecho, el último sondeo para autonómicas elaborado por Sondaxe y publicado por La Voz de Galicia confería al PP un apoyo del 45,7% y un total de 40 diputados; mientras el 25,9% del BNG le depararía 20 escaños y el PSdeG, más de 10 puntos por debajo, se quedaría con 13 parlamentarios, uno menos que en la actualidad. Según esta encuesta, Unidas Podemos, Sumar o una eventual nueva Marea gallega volvería al Hórreo con dos diputados.Otro estudio demoscópico más reciente pronostica que los de Ana Pontón se consolidan como la alternativa de gobierno en Galicia, aumentando su distancia con los socialistas mientras la suma de las derechas superaría el 49% de voto en las elecciones al Parlamento gallego.

En el lado opuesto a la mayoría conservadora que se pronostica para 2024, el mismo estudio refleja como el 26% de los gallegos optaría por el BNG de Ana Pontón, que se consolidaría así como la referencia de la alternativa al PP con 21 escaños. El PSdeG de Valentín González Formoso seguiría en caída, de modo que los nacionalistas duplicarían la ventaja que le llevan actualmente a los socialistas. Esta encuesta confiere también diputados a Unidas Podemos, que podrían acabar en el BNG si el espacio rupturista no supera su crisis, lo cual podría acabar apuntalando definitivamente el liderazgo de Ana Pontón.

Cuando falta más de un año para las elecciones autonómicas en Galicia, la demoscopia refleja que la marcha de Alberto Núñez Feijóo no ha beneficiado al PSdeG y que Formoso carece de opciones reales de presidir la Xunta. Ahí radica su resistencia a abandonar la Diputación coruñesa. Mientras tanto, la crisis de liderazgo persiste en el PSdeG y Ferraz la ha alimentando volviendo a abrir el debate.

 

@mundiario