La central térmica de Endesa en As Pontes comenzó el miércoles las pruebas con una mezcla de biocombustibles y carbón que, en el caso de que fueran eficientes desde el punto de vista técnico y rentables económicamente permitirían evitar el cierre de unas instalaciones de las que dependen, entre empleos directos e indirectos, alrededor de 700 familias de la comarca.

Fuentes de la compañía explicaron que estos tests se dividen en dos fases. En esta primera, llamada de aproximación, se evaluarán dos mezclas distintas de biocombustibles y carbón en diferentes proporciones, pero con preponderancia de mineral en todos los casos. Para ello, la compañía ha adquirido 8.000 toneladas de carbón kazajo, que se caracteriza por su alto poder calorífico, el más adecuado desde el punto de vista técnico para este tipo de pruebas.

Esta primera fase concluirá a finales de este mes de septiembre; a partir de entonces comenzará la segunda, la de las pruebas definitivas, que tendrá una duración superior, de unos cinco días por cada una de las muestras. En octubre, y con los resultados de las mismas en la mano, Endesa valorará la viabilidad de producir energía con esta combinación de mineral y biocombustibles, comprados en este caso a la empresa lucense Agroamb, que suministra para esta operación un total de 20.000 toneladas.

El comité de empresa de Endesa As Pontes tiene la esperanza de que los resultados de las pruebas sean positivos y permitan de este modo alargar la vida útil de la central térmica. Su presidente, Luís Pico, expresó su deseo de que “saian ben e sirvan para evitar a destrución de emprego” que conllevaría un balance no satisfactorio para la compañía energética. “Estamos falando de que, de ser así, entre 70 e 80 traballadores da central serían recolocados”, apunta, “coas consecuencias que iso tería para o sector industrial do concello e a comarca”.

Con todo, Pico lamentó no percibir “moito interese” en la empresa “por que as probas saian adiante”, pese a que, aseguró, “o traballo do noso laboratorio foi tremendo e sen descanso por atopar unha alternativa viable ao longo dos últimos meses”.

Además, el presidente del comité de empresa subrayó que, aunque se ha cumplido el compromiso de realizar las pruebas este verano, “o proceso de peche segue adiante, non se suspendeu”, de ahí que sospeche que “a propia compañía non teña moito interese, ou confianza, en que isto vaia para diante”.