La era de la descarbonización en España trae imágenes como la que se vive este miércoles en el ayuntamiento coruñés de Cerceda, en A Coruña, donde Naturgy ha procedido al derribo de la torre de refrigeración de la antigua térmica de Meirama. Mientras muchos otros países como Alemania, ante la situación energética actual, retoman el uso del carbón, España sigue imparable en el proceso de descarbonización.

La chimenea, que fue derribada mediante una voladura controlada en apenas unos minutos, estuvo activa de forma ininterrumpida durante 40 años. La térmica cesó en sus actividades en 2020, dentro del proceso de descarbonización.

Imagen de la torre de refrigeración antes de su voladura controlada
Imagen del derrumbe, en apenas unos segundos

La operación de voladura controlada conllevó que vecinos de las zonas más próximas a la central fuesen evacuados durante la operación. Además, se procedió al corte del tráfico en las inmediaciones de la carretera comarcal que discurre cerca de las instalaciones.

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 https://www.youtube.com/watch?v=sbkhlskPoBY

Imagen icónica del paisaje industrial de Galicia, la torre de refrigeración medía 108 metros de altura contaba con un diámetro de 48. Queda todavía en pie la gran chimenea de 204 metros de altura de Naturgy que, está previsto, sea retirada a principios de año.

Del carbón al hidrógeno

El fin del carbón abre la puerta a las nuevas energías. En Meirama, Naturgy, de la mano de Reganosa y Repsol tiene en marcha un proyecto para la creación de una planta de hidrógeno verde. En su fase inicial, en el horizonte de 2025, alcanzará una potencia de 30 megavatios, aunque el objetivo es llegar a los 200. Producirá más de 4.000 toneladas de hidrógeno verde al año de forma inicial, pudiendo alcanzar las 3.000 anuales. Solo en su primer estadio espera generar unos 400 puestos de trabajo entre directos e indirectos.

 

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