El triatleta L. A. V. G, de 30 años de edad, que el pasado domingo sufrió un desvanecimiento súbito cuando se encontraba realizando la prueba de natación correspondiente al ironman de As Pontes, permanece en estado grave en la unidad de cuidados intensivos del hospital Arquitecto Marcide de Ferrol, a donde fue trasladado después de entrar en parada estando en el agua y tras una reanimación que se prolongó durante más de veinte minutos en la orilla. Se cumple así el tercer día en el que el participante en la prueba deportiva continúa luchando por su vida, según han confirmado fuentes autorizadas.

La pérdida de consciencia del joven se produjo, además, en la primera de las tres pruebas que conforman el evento deportivo. Según precisaban desde la organización llevaba cubiertos unos 1.800 metros de nado de los 3,8 kilómetros totales de la competición. La fortuna quiso que otro competidor se percatase de que el varón había perdido la consciencia y se encontraba flotando volteado y trató de moverlo. Ante ese escenario un miembro del staff con nociones en socorrismo y salvamento se lanzó vestido al agua y logró trasladarlo hasta la orilla de la playa del lago, que estaba a unos veinte metros del punto en el que el participante sufrió el problema de salud, cuyas causas no han trascendido.

Del hecho de que el triatleta entrase en parada en los compases iniciales del ironman puede extraerse que el sobreesfuerzo de una competición tan exigida, que se prolonga durante más de ocho horas y que engloba también la realización de 180 kilómetros en bicicleta y 42,2 kilómetros de carrera a pie, no fue el dotante de la pérdida de consciencia. Se desconoce si el joven padecía algún tipo de patología médica previa.

Una vez en el centro hospitalario de la cabecera de comarca el joven fue ingresado en la unidad de cuidados intensivos donde permanece desde el domingo.

 

LA VOZ DE GALICIA