Endesa ha comunicado al antiguo personal de la térmica pontesa que había retornado temporalmente para reactivar la central que debe incorporarse de nuevo a sus puestos el día 1 de julio. Junto a este grupo de 19 trabajadores, también se encuentra otro de cinco personas a las que ya les indican también que tienen que pasar a ocupar otras plazas fuera de la zona. Además, existe un colectivo de diez empleados de la terminal descargadora de Endesa en el puerto exterior que están siendo requeridos de forma puntual en Ferrol cuando llegan buques con carbón.

Este jueves, delegados del comité de empresa de la central —de CC.OO. y CIG— y de las instalaciones portuarias — de CC.OO. y del Sindicato Independiente de la Energía— se concentraron delante de la térmica pontesa para reclamar a Endesa que paralice los desplazamientos del personal retornado. En el primero de los casos, hasta que la eléctrica obtenga el permiso de cierre, y en el segundo, ante el nuevo escenario que se abre en las instalaciones de la Caneliñas, que Endesa las ha reconvertido en centro logístico para la carga y descarga de mercancía general y graneles.

Ricardo Casas, presidente del comité de la central, recordó que Endesa había anunciado que extendía las garantías de ocupación a sus trabajadores auxiliares y a su personal retornado hasta el día 31 de julio, pero ahora ha modificado esa decisión y finalizará el día 1 la permanencia de los trabajadores propios. «La empresa dijo siempre que mientras que no tuviese la autorización del cierre, las condiciones del mercado la obligaban a mantenerse en disposición de funcionar», recordó Casas, quien insistió en que, sin ese permiso, puede darse la circunstancia de que, más adelante, haya que volver a traer personal de fuera para operar la planta.

Subcontratación

Sardiña sostiene que Endesa cuenta con trabajo suficiente para que la decena de trabajadores desplazados puedan regresar a estas instalaciones, y critica que trabajos que llevaba a cabo la plantilla directa, ahora se están subcontratando a empresas auxiliares.

Víctor Ledo, secretario de la Federación de Industria de CC.OO. de Galicia, cuestionó que Endesa «tome decisiones de forma unilateral», cuando forma parte de una mesa nacional en la que también tienen presencia otras eléctricas, el Ministerio de Transición, su sindicato y también UGT. Para abordar la situación creada en torno al cierre de la térmica, Ledo reclama al gabinete de Teresa Ribera que convoque con urgencia la mesa de transición justa de As Pontes. «Sin la autorización de cierre, Endesa no tiene las condiciones para desplazar personal de la central ni para rescindir contratos a las auxiliares», afirmó.

El próximo lunes, a las 16.30 horas, la eléctrica ha convocado a los sindicatos UGT, CIG y CC.OO. para analizar el futuro de la central.

Endesa solicitó el cierre de la térmica pontesa a finales del 2019 y sostiene que desde entonces está trabajando en el fin de la generación de carbón para superar los inconvenientes del cese de actividad, aunque admite que la espera no es lo idóneo para la zona. Fuentes de la compañía afirmaron que el desmantelamiento de la planta de As Pontes generará más empleo del que sustenta su operación parcial y provisional y permitirá avanzar en los proyectos. Además, añade que las empresas contratistas que actualmente prestan sus servicios en la central podrán continuar realizando el predesmantelamiento.

 

La Voz de Galicia