El proyecto de Ence para As Pontes es una iniciativa que tendrá carácter complementario de la actividad que desarrolla la compañía en Pontevedra, pero nunca se deberá interpretar como una alternativa a la planta de Lourizán, según explicó el director territorial de Ence en GaliciaAntonio Casal. En una comparecencia pública esta mañana acompañado por el conselleiro de Industria, Francisco Conde, Casal expuso los puntos principales sobre este proyecto, que no fabricará pasta de papel de celulosa sino papel tisú, enfatizando además de forma rotunda que en As Pontes no se puede construir una pastera como la pontevedresa porque no reúne los requisitos técnicos necesarios. «As Pontes non é unha pranta de produción de celulosa e non ten nada que ver co que hoxendía se fabrica en Lourizán, por queda algunha dúbida. Nas Pontes non se pode instalar unha fábrica de celulosa», sentenció.

Antonio Casal manifestó: «Esta planta, ainda que é unha actividade diferenciada, si que está concebida como complementaria á biofábrica de Lourizán. Este é o compromiso con Lourizán, que queremos recalcar, que queda demostrado cos fortes compromisos que temos previstos de 395 millóns de euros no caso de que a biofábrica siga funcionando. E é un compromiso sólido, firme e que temos contraído cos traballadores de Ence e un pacto de futuro coas 200.000 familias que se benefician da nosa actividade en Lourizán e de todo o sector forestal galego». A lo largo de su intervención, Casal reiteró una y otra vez que una planta no implica el traslado o alternativa de la otra. «As Pontes é un proxecto independente e diferenciado da biofábrica de Pontevedra e un proxecto que ten unha capacidade e unhas dimensiones moi inferiores a Lourizán, por iso insistimos tanto en que é unha pranta complementaria e non alternativa», destacó el portavoz de la compañía.

El cronograma que se ha marcado la empresa para ponerlo en marcha es el siguiente: doce meses para completar estudios, viabilidad y concepto; la ingeniería de detalle y tramitación de permisos se prolongaría hasta diciembre del 2024; la construcción empezaría a principios del 2025; y la entrada en funcionamiento sería para enero del 2027.

Casal indicó que se trata de un proyecto que está en estudio y que ahora dedicarán doce meses a su mayor concreción. Preguntado sobre qué pasará con As Pontes si el Supremo fallase en contra de la continuidad de Ence en Lourizán, aseveró: «Nos estudos que estamos contemplando é nun escenario con Lourizán en operación, pero certamente As Pontes é independente de Pontevedra, alí non se pode construir unha fábrica de celulosa, e se se dese ese caso [un fallo contrario a la prórroga] teríamos que buscar fibra virxe [pasta de celulosa] nalgunha outra parte, pero en calquera caso, a fábrica de Lourizán é pedra angular para que este proxecto poida completar o círculo en Galicia», argumentó.

El conselleiro de Industria, Francisco Conde, destacó la «importancia» que tiene para Galicia la propuesta de Ence para As Pontes y agradeció al consejo de administración de la compañía su apuesta por As Pontes. «Trátase dunha iniciativa impotante para crear nas Pontes un polo de economía circular e de bioeconomía. Este é o obxectivo e o alcance do proxecto», subrayó. «É un proxecto pioneiro, que vai a marcar un posicionamento de Galicia no eido da economía circular e un proxecto marcado pola innovación e as enerxías renovables», añadió. El titular de Economía y vicepresidente de la Xunta aseguró que tanto desde el punto de vista cuantitativo como cualitativo, esta propuesta es bienvenida por lo que supondrá para la comunidad autónoma.

Defensa de la factoría pastera de Lourizán

Conde explicó que se decidió comparecer en Pontevedra para exponer esta iniciativa porque se trata de un «proxecto complementario á factoría de Lourizán» y añadió: «Precisamos da presencia de Lourizán en Galicia e sobre todo porque vai a permitir a Ence completar o seu ciclo en Galicia. Isto era unha aspiración que durante moitos anos temos trasladado, pasar da produción de celulosa á de papel de servilletas, hixiénico e de cociña». Es más, para el titular autonómico, «Lourizán segue sendo unha industria estratéxica para Galicia e para a nosa economía». Conde se comprometió también a agilizar en la medida de lo posible la tramitación administrativa. Desveló que llevaba mucho tiempo analizando con Ence la ubicación y las necesidades y viabilidad de la factoría en As Pontes. Habrá que impulsar la figura de un «proxecto industrial estratéxico», que permitirá tramitar con mayor velocidad los permisos necesarios.

Además, Conde calificó de «postura equivocada do Concello» de Pontevedra en relación a la consecuencia de la planta de As Pontes. El conselleiro de Industria le replicó al gobierno local pontevedrés que no se trata de una alternativa de ubicación, sino de un proyecto complementario. «Son dos proxectos que nada teñen que ver nin na materia prima que utilizan nin no proceso produtivo nin no produto final», destacó.

Planta autosostenible e innovadora a nivel mundial

La futura instalación en As Pontes no será una planta de reciclaje al uso, porque será muy innovadora, desarrollada por los técnicos en la planta piloto de I+D que Ence tiene en Pontevedra. En As Pontes se propone una planta de fabricación de fibra reciclada blanqueada, que va a tener como materia prima básicamente cartón recuperado, que se va a purificar y blanquear con un sistema totalmente libre de cloro. «Sabemos que vai haber una demanda importante no mercado e hoxendía este produto tal cal non hai que o faga no mundo», aseveró Casal.

La factoría producirá 100.000 toneladas anuales. En la planta de Ferrolterra también entrará un 20 % de fibra virgen procedente del complejo fabril de Ence en Pontevedra. Además, está previsto que en la misma ubicación exista una planta de cogeneración con biomasa de 150 megavatios térmicos que pueda dar servicio a las instalaciones con energía térmica y eléctrica. Se utilizará lo suficiente para el autoabastecimiento de la fábrica y el resto, 30 megavatios, se verterán en el sistema general, favoreciendo a empresas y residentes del entorno. El consumo de agua será de un máximo de dos millones de metros cúbicos al año -una fábrica de celulosa como la de Pontevedra consume 12 millones de metros cúbicos anuales-.

No se utilizarán combustibles fósiles y al no emplear madera, no hará falta incrementar la superficie de eucalipto. «A bioplanta que presentamos é un exemplo de transición xusta, que propón como xa fixemos nalgunha outra instalación, a transformación dunha central térmica de carbón relativamente antiga nunha nova instalación, que pretende ser o xerme dun enclave estratéxico que veña a convertir As Pontes nun polo industrial de bioeconomía de Galicia», aseguró el representante de la compañía.

La inversión será de más de 350 millones de euros, de forma provisional, que se reparten así: 125 para fibra recuperada, 75 para planta de papel de aplicaciones higiénicas o tisú, 155 para la cogeneración. Se estima la creación de 1.186 puestos de trabajos: 150 directos, 400 indirectos y el resto inducidos.

La Voz de Galicia